A la Att/ D. Javier Sánchez-Prieto
Desde CTA queremos manifestarle en primera instancia nuestro interés por el futuro de IBERIA, por lo tanto del conjunto de la Empresa. Pero empieza a inquietarnos, que no sea así en toda la estructura de la compañía, al observar cómo se está reorganizando la DIRECCIÓN TÉCNICA, en concreto en lo que se refiere a Mantenimiento en Línea.
Por un lado el abandono del H-3, situado en una posición estratégica ya que está prácticamente entre la T-4 y la T-4 Satélite, en posición de aproximación a las instalaciones (H-3) de menor dificultad para las decisiones que tiene que adoptar la Torre de Control de AENA, que la vía de traslado al H-5 de La Muñoza.
Por otro lado no admite comparación la capacidad de admisión de aeronaves en el H-3 con la capacidad que se pretende en el H-5, ya que este último está limitado a solamente tres aeronaves, 1 de tamaño grande y 2 de tamaño mediano o pequeño, lo que nos lleva a entender que se pretende realizar la mayor parte del Mantenimiento en Línea que se tenga que realizar con trabajos en el Hangar que se llevaran a cabo en la Plataforma existente enfrente del H-5, porque es imposible que quepan en las instalaciones del H-5, ya que la lógica nos indica que no caben dentro.
Sr. Presidente, las grandes y modernas empresas, se caracterizan por cuidar la Salud y Seguridad de sus trabajadores, y en este proyecto que se nos presenta en lo inmediato, no parece darse el caso. No pueden obviar la Ley de prevención de Riesgos Laborales, sobre todo en el apartado de “estrés térmico”, tanto por frio como por calor. Cualquiera que conozca mínimamente el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas –y su extensión a La Muñoza- sabe que en verano se alcanzan temperaturas por encima de los 40º y en invierno por debajo de 0º, disparando la sensación térmica muy por debajo de esta temperatura.
En CTA entendemos que no todo vale en el ajuste de gasto, porque lo que a priori y sobre el tablero nos puede parecer un ahorro de gasto, puede conllevar como contrapartida un aumento al no contemplar el apartado que garantice el mínimo confort legal que les obliga y además la posición estratégica de una instalación –H-3- a la que se le está sacando enorme rentabilidad en una época de crisis tan grave como la que estamos viviendo.
¡NO DEJEMOS LA PUERTA ABIERTA A LA COMPETENCIA, Y HAGAMOS BIEN LAS COSAS, GARANTIZANDO LA SALUD DE NUESTROS TMA Y CERREMOS LA PUERTA A LA COMPETENCIA!
¡NO DUDEN QUE SE LO VAMOS A EXIGIR!