Lo que está ocurriendo es consecuencia del consentimiento por parte de la representación social

Businessman with Computer overworked
CTA lo advirtió por activa y por pasiva. Lo que estaba ocurriendo. La firma del ERE con los condicionantes que esto conllevaba (Disposición Final Quinta), la firma de todas las Modificaciones Sustanciales de Trabajo por parte de los sindicatos de connivencia con la Empresa, su rúbrica en trasladados, bajas incentivadas bajo presión, despidos, cambio de categoría laboral… todo ello bajo el criterio de “tú me interesas más que aquel”. ¿Los motivos? Muchos y muy diversos, pero con poca presencia del valor profesional.

Y ahora, el tren está llegando a todos. Lo dijimos, llegaría a todos. Se seguirán subcontratando áreas (no porque resulte más barato, porque lo que se paga al empleado subcontratado sí es más económico, pero lo que se le entrega a la empresa subcontratada en muchas ocasiones supera el coste de la persona que ha sido denominada “non grata”). Pero se seguirá haciendo. ¿Cuántos quedarán? Pocos y desavenidos o mejor dicho desconocidos. LLegará el momento en que alguien diga: “ayer echaron a tu compañero” y éste contesté “venga ya”, y le pregunten: “¿cómo se llamaba?” y contesté: “no sé, nunca le pregunté”.

CTA lo ha estado diciendo. Pero ya es tarde. Se les ha dado la legitimidad a dos sindicatos, conocidos por todos, para que campen a sus anchas. ¿Por qué? Cada uno que desarrolle su imaginación como quiera. Somos fiel reflejo de la sociedad española actual.

Solo recordaos que somos responsables de nuestras propias decisiones…. Y habría que detenerse a pensar si estar afiliado a uno de estos dos sindicatos o concederles el voto, o no ir a votar (para facilitar el voto corrupto por correo) fue lo mejor que pudimos hacer.